Graziella Moreno nos habla de su última novela: Los animales de ciudad no lloran
Para quienes no te conozcan: ¿Quién es Graziella Moreno?
Graziella Moreno es una escritora barcelonesa, que trabaja en la Administración de Justicia primero como funcionaria en los juzgados desde 1991 y ya en 2002, como juez. Ha publicado las novelas, Juegos de maldad (2015, Grijalbo), nominada a mejor novela por el primer festival de Cubelles Noir y con mención especial del jurado, El bosque de los inocentes (2016, Grijalbo), Flor seca (2017, Alrevés), Invisibles (2019, Alrevés), premiada el 9 de marzo de 2020 por la Fundación QSD Global, y Querida Elsa (2018) en formato digital en la plataforma Black and Noir. Ha participado en antologías de relatos en catalán (Barcelona viatge a la perifèria negrocriminal, 2017 Alrevés) y en castellano (Cartagena Negra, 2017, Los Bárbaros Noir, 2018 y Barcelona- Buenos Aires, 11.000 kilómetros, 2019,Trampa Ediciones), y otros publicados en revistas digitales (Solo Novela Negra, Fiat Lux). Fue miembro del jurado en el concurso de relatos de terror del programa Negra y Criminal de la cadena SER.
El salto de la araña (Alrevés, 2020), ha obtenido el Premio de Letras del Mediterráneo de la Diputación de Castellón en su edición de 2020 a la mejor novela negra y ha sido nominada a los premios NOVELPOL 2021, Cartagena Negra 2021, al VII Premio Ciudad de Santa Cruz de Tenerife de Novela Criminal. Resultó ganadora del IV Premio Negra y Mortal a la Mejor Novela Nacional del festival La mar fosca en 2021.
En 2021 le ha sido otorgado el III Memorial Antonio Lozano del Festival Granada Noir, galardón que le ha sido concedido por el carácter social que siempre impregna sus obras.
En 2022 ha publicado Los animales de ciudad no lloran, Alianza de Novelas.
¿Cómo comenzó tu pasión por la escritura?
Escribo desde niña, de hecho quise estudiar periodismo para dedicarme a escribir, pero no conseguí matricularme en su día y empecé Derecho. Siempre he escrito relatos y novelas, incluso alguna policiaca que se llamaba “Asesinato en un ascensor” (tenía doce años y no llegó a ninguna parte como era de esperar). Creo que cuando leer es tu pasión acabas por escribir.
¿Quién es tu autor de novela negra/policiaca preferido?
Es una pregunta difícil. Si puedo decirte dos, me quedo con John Connolly porque escribe una tipo de novela negra con elementos sobrenaturales que nadie ha conseguido hacer y con Francisco González Ledesma, uno de nuestros clásicos españoles.
¿Qué libro estás leyendo actualmente?
“La ciudad de los vivos” de Nicola Lagioia, editado por Literatura Random House, un true crime sobre unos jóvenes que asesinaron brutalmente a otro en Roma sin ningún motivo. Es fascinante y muy bien narrado.
¿Planificas mucho tus novelas o eres escritora de brújula?
Planifico un poco, lo cierto es que cada vez menos. Pero siempre sé la historia que quiero contar aunque reescribo constantemente. Creo que cada vez estoy más en modo “brújula”.
En 2015 la editorial Grijalbo publicó tu primera novela “Juegos de maldad” y, desde entonces, no has parado de escribir ¿Cómo compaginas tu profesión con la escritura?
No es nada fácil. Mi profesión es muy exigente y me roba muchas horas, así que no puedo escribir todos los días, ni tampoco tener un horario establecido. Intento ponerme un poco cada día y si no es posible, al menos repasar, idear tramas, apuntar cosas que luego pueda usar.
¿Qué sentiste al ganar el Premio Letras del Mediterráneo a la mejor novela negra por El salto de la araña?
Una gran alegría. Cuando surgió la oportunidad de presentarme no me lo pensé dos veces y aunque lo haces con mucha ilusión nunca piensas que puedas llegar a ganar. Ganar un premio te da mayor visibilidad y es una forma de acercarte a más lectores.
¿Hay un elemento común que los lectores puedan encontrar en tus libros?
Creo que mis novelas tratan sobre la sociedad de nuestros días. Hablo sobre problemas reales: el maltrato, el drama de las desapariciones, delitos como la pederastia…Retrato al ser humano tal y como es, capaz de lo mejor y de lo peor. Y reflexiono sobre valores como la justicia, el castigo que establece la ley ante el delito, y la protección a los más débiles.
¿Cuáles son, en tu opinión, los ingredientes de una buena novela negra?
Como lectora me gusta que lo que me cuenten en una novela negra sea realista y que si no lo es, el autor sea capaz de construir una buena ficción sin engañar al lector. Además la novela debe ser ágil, lo más adictiva posible y plantear incógnitas que deben quedar resueltas al final de la historia.
¿Qué consejos le darías a alguien que está empezando con su primera novela?
Que no se desanime. Todos hemos empezado alguna vez y esta es una carrera de fondo en todos los sentidos. Que lea muchísimo, porque si no lees no puedes escribir. Y que tenga como máxima que si los demás han podido hacerlo, ¿por qué yo no?
Tu última novela, “Los animales de ciudad no lloran”, es un thriller con trama legal en el que, a priori, se nos presenta un caso de violencia de género y que al final, es mucho más complejo de lo que prometía. ¿Cómo surgió la idea?
Los seres humanos somos complejos. Quería hablar sobre la justicia y la verdad, y de cómo se usa el sistema legal en beneficio propio. La trama gira alrededor de la denuncia de Nadia Linde contra su amante. Nadia es un personaje ambiguo, del que todos dudan. Es el centro de todas las miradas. ¿Quién es ella realmente? ¿Es una víctima o todo lo contrario? Olivia y Víctor, los abogados que se enfrentan en este caso tienen también un peso importante, no solo por la forma en la que cada uno entiende y ejerce su profesión, sino también por ser amigos íntimos que vuelven a encontrarse, con las consecuencias que ello tendrá en sus vidas. Hay varias historias de amor en esta novela.
Recomiéndanos tu última novela.
Los animales de ciudad no lloran, es un thriller legal ambientado en Barcelona. Su Ciudad de la Justicia, en la que se sitúa la mayoría de los juzgados de la capital, ha inspirado la portada porque es el marco en el que se desarrolla la trama, junto con los despachos legales y los abogados, verdaderos protagonistas de la novela. Mi intención es reflexionar sobre los valores de la justicia y de la verdad, desde el punto de vista de los abogados y las estrategias que usan para defender a su cliente en el ámbito penal. Tal y como dice uno de los personajes, la idea de la justicia es hermosa, pero la realidad es otra. La defensa del cliente está por encima de todo, por encima la verdad, un valor que solo interesa a la sociedad, no al abogado: su objetivo es convencer al juez de que su cliente es inocente sin importarle si lo es o no.